Las malformaciones craneales en bebés, como la plagiocefalia, la braquicefalia o la escafocefalia son una deformación del cráneo en crecimiento producida por la presión mecánica de alguna de sus partes antes, durante o después del parto.
Las deformidades craneales afectan en torno al 12% de los bebés. Suelen presentarse en bebés que han crecido en un ambiente uterino restrictivo ( embarazo múltiple, pelvis pequeñas, miomas uterinos,..) niños prematuros, bebés que permanecen muchas horas en la misma posición ( dormir siempre boca arriba). Niños que padecen TMC ( tortícolis muscular congénita), que por un acortamiento muscular del cuello tiene tendencia a apoyarse siempre en el mismo lado de la cabeza, favoreciendo la aparición de la plagiocefalia.
Los huesos que forman la bóveda y la base craneana del feto, el bebé y el lactante de menos de 3 meses son todavía poco osificados y están separados unos de otros por suturas y fontanelas.
Si por alguna causa reciben una presión excesiva o continuada, queda interferido su crecimiento normal y se pueden provocar deformaciones por el aplanamiento de una parte del cráneo.
Índice craneal: Una cabeza normal tiene una forma ovalada vista desde arriba y una proporción normal entre anchura y longitud del 80%. Este ratio nos permite cuantificar el grado de la deformación del cráneo del bebé.